Hoy es Jueves Santo, hoy Almuñécar se estremece por verte triste en tu dolor, María. Por eso, tus fieles y devotos hijos que te portan, te consuela en tu aflicción.
Siete puñales como siete dolores que te atraviesan el corazón al ver a tu Hijo así. Madre quiero consolarte y limpiarte esas lágrimas con este pañuelo que te doy en son de palabras.
Reina de los Dolores, iluminas el corazón de los sexitanos cuando sales en la tarde del Jueves Santo, cuando nos bendices el Viernes de Dolores y el Viernes Santo. Tu pueblo se arrodilla ante tí para recibir tu bendición y para rendirte
Reina y Madre de los Dolores, yo como fiel hijo y devoto tuyo, quiero acompañarte cada Jueves Santo hasta que mis fuerzas puedan hacerlo porque aunque esté lejos de mi tierra sexitana, como lo estoy ahora, te sigo llevando en mi corazón humilde, Madre de los Dolores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario