Recordando artículos... Cruz de Carey: La autocritica, algo necesario para mejorar en el mundo cofrade

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Hoy, escuchando un programa cofrade en la radio, en el cual estaban haciendo balance de la pasada Semana Santa, he recordado este artículo, en el cual trato el tema de la autocrítica. La autocrítica es fundamental para crecer y para mejorar como personas, y en ámbito de las hermandades debe ser esencial. Es por ello, que aquellas personas que rigen los destinos de una hermandad, es decir, los miembros de su Junta de Gobierno, deben tener este juicio crítico en sus decisiones y hechos al frente de su gestión. Evidentemente debe ser un autocrítica sana, en la cual reconozcan sus fallos o errores, los asuman y se propongan corregirlos o atenuarlos, en la medida que sea posible.


He visto en varias ocasiones, decisiones erróneas, que han perjudicado a una hermandad y a todos sus hermanos; sin embargo, no se ha tenido por parte de aquellos que han tomado dicha decisión, esa autocrítica sana y necesaria, para corregirlos, y como menciono en este artículo, he visto autocomplacencia, algo que a mi juicio ha perjudicado a la hermandad en cuestión y a su crecimiento. Pienso que junto a la autocrítica, debe haber otra cualidad fundamental en nosotros mismos para crecer como personas, cofrades y hacer crecer a la hermandad que gestionamos como miembro de su Junta de Gobierno, y es la humildad. De esta cualidad hablaré más adelante.

Os dejo este artículo que escribí hace tiempo en Gente de Paz, espero que os guste y que la uséis.

Después del paréntesis de la Semana Santa, en la cual no pude escribir el artículo semanal, regreso para hablar sobre una actitud que el cofrade debe tener -no sólo el cofrade-. Ha sido una frase que leí en un grupo de una red social que me ha hecho pensar. La frase la decía una cofrade, y más o menos, expresaba lo siguiente: "cómo iba a criticar la Semana Santa de su localidad".

Esta frase no sólo me ha dado a pensar sino también recordar acciones y artículos que he visto ya en Gente de Paz criticando algunas actitudes de algunos cofrades, en las cuales tiene como un afán de autocomplacencia, así como son críticos con todas las hermandades, menos con la suya. Esta palabra, critica o en su defecto, el verbo criticar, parece que a muchos la toman como si tuviera una connotación negativa, pero no es así.  He buscado esta palabra en el diccionario de la RAE, asimismo el verbo criticar, y dice lo siguiente de esta última. En su primera acepción, dice lo siguiente: juzgar de las cosas, fundándose en los principios de la ciencia o en las reglas del arte. En su segunda, lo siguiente: censurar, notar, vituperar las acciones o conducta de alguien. Ya del sustantivo "crítica" viene más acepciones, pero me he parado en dos que son éstas que les cuento ahora: examen y juicio acerca de alguien o algo y, en particular, el que se expresa públicamente sobre un espectáculo, un libro, una obra artística, etc.; y conjunto de los juicios públicos sobre una obra, un concierto, un espectáculo, etc.

Después de esta clase de lenguaje, sobre esta palabra, les voy a contar lo que veo en algunos cofrades. Les veo que les falta auto-critica, para tener valor de criticarse a sí mismos, o a su hermandad, cuando no hace las cosas bien, o muestran actitudes poco o nada acordes, a las que tiene que presentar o mostrar. No son capaces no sólo de eso, sino que también nos tachan a los cofrades que criticamos, no sólo a las hermandades o cofradías que no hacen bien las cosas, así como somos críticos con nuestras propias hermandades; de no buenos cofrades o anti-cofrades. 

Me enerva la sangre cómo nos tachan de eso. Por ejemplo aquí en el propio Gente de Paz, he visto esto que les comento, en algunos comentarios en el perfil de una red social, justo en los enlaces de artículos publicados por esta Web cofrade. Por favor, para mejorar hay que tener un sentido crítico, no sólo con los demás, sino consigo mismo, y en el caso cofrade, también con la hermandad a la que pertenecemos. Debemos censurar y comentar aquello que no nos guste, pero desde el sentido constructivo, porque he visto como algunos "kofrades", buscan hacer daño con criticas que en vez de buscar lo mejor para una corporación, buscan su destrucción y hundimiento. Pero no sólo con las hermandades, sino también entre cofrades ha ocurrido esto, con campañas para destruir algún determinado cofrade por envidia o por otras razones.

Volviendo a lo principal del tema que les hablo, he podido comprobar -además me ha comentado algún amigo- como en las típicas tertulias entre cofrades, como unos y otras critican a las demás corporaciones, menos a la suya. Eran personas que pertenecen hasta juntas de gobierno de dichas hermandades, y no han sido lo suficiente valientes o no han querido ser críticos. También pienso como decía anteriormente, puede ser que tengan un afán de auto-complacencia, que no ven nada malo en lo que hacen, y si hacen algo malo, es culpa de los demás,  

De esto, recuerdo como hace un año, me comentaron que había un cofrade, que llevaba encima, una grabadora. Este cofrade realizaba y grababa, al paso de las cofradías que veía, criticas sobre cualquier cosa que viera que no le gustaba . Evidentemente, lo hacía con todas, menos con la suya, ya que la suya, a la que pertenece, es la mejor y no tiene defectos, ni hace nada malo. 

Les voy a contar una cosa, yo soy crítico con mi hermandad, porque veo actitudes y aptitudes que no se deben producir, y son censurables. No crean que por hacer esas criticas, lo que busco, es hundir a mi hermandad, no es eso, lo que busco es que vaya a mejor, que mejore en sus formas, actitudes y aptitudes; además en su organización. Busco que se porten como es debido con determinados cofrades o hermanos, y que estén a la altura de la hermandad a la que gestionan aquellos que están al frente.

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Estoy de acuerdo en muchos de los temas que se han hablado en Gente de Paz, y además soy critico sobre lo que se habla en ellos. Asimismo con las actitudes que les he hablado en mi sección, porque yo he aprendido a ser critico, critico constructivo con el objeto de mejorar. Por ejemplo, en mi laboral así como cuando era estudiante universitario, he aprendido a ser autocritico conmigo mismo, he asumido responsabilidades cuando he realizado mal las cosas, o he tenido una actitud no acorde a la que se tiene que tener. Por eso, me gustaría que se tuviera esa autocritica por parte de algunos cofrades -cosa que no la veo por ningún lado-, que sean responsables, y que busquen no sólo lo mejor para su hermandad, sino que si se han equivocado, asuman su responsabilidad y su culpas, busquen solucionar y mejorar como cofrades, así como personas.

Juan Evaristo Callejas Jerónimo