El pasado 12 de Septiembre fue la Festividad del Dulce Nombre de María. Quién sino la Virgen, la madre del Hijo de Dios, tendría un nombre tan dulce. La advocación del Dulce Nombre en las imágenes que representan la figura de la Virgen María son bastantes y podemos verlas varias imágenes con dicha advocación en algunas capitales de provincia de Andalucía como Sevilla, Granada o Málaga. De estas tres ciudades voy a hablar de sus dolorosas con esta advocación.
En tierras sevillanas está presente una dolorosa que va bajo palio en la noche del Martes Santo, acompañada del Discipulo Amado, y que es precedida por su Hijo, que se encuentra ante la presencia de Anás, anterior Sumo Sacerdote del Sanedrín. Aunque hay otra imagen con esta advocación y he querido escribir de ésta. Pese tener como nombre oficial la hermandad la advocación de dicha dolorosa, es más conocida dicha corporación de pasión por el golpe en la cara que recibe Jesucristo de un sirviente de Anás, es decir, una bofetá (como diríamos en el sur). "La Bofetá", hermandad radicada en la Parroquia de San Lorenzo, en el centro de Sevilla, tiene una bella dolorosa realizada por el maestro de los "misterios" y que sabía perfectamente recrearlos, Don Antonio Castillo Lastrucci, que la realizó en 1924. Es una dolorosa que no he visto ya que nunca he entrado en su sede canónica las veces que he pasado por la Plaza de San Lorenzo para ir a ver al Señor de Sevilla. Una vez, hace ya años, iba a entrar, pero iba a cerrar, y me quedé con las ganas de ver a esta dolorosa como la Virgen de la Soledad que hace estación de penitencia el Sábado Santo. Me gustaría verla en la calle, en su palio con el dulce tintineo de sus bambalinas y ver su espléndido manto diseñado por el gran Juan Manuel Rodríguez Ojeda, que lo diseñó en concordancia con dichas bambalinas y techo del palio.